"Amo esa verdad obscena
camuflada de implacables latidos
Quiero esa sonrisa lujuriosa
que se crece con cada luna menguante,
a la espera de su totalidad
Adoro ese deseo
encharcado de vanidad vital
Te necesito,
necesito ese dedo índice sobre los labios,
apuntando silencio
allá donde no hay lugar al raciocinio
Deseo que arda aun más la antorcha,
guardiana de cada impulso
¡Vamos, osado agnóstico!
Llama a mi puerta para convencerme de la nada,
te responderé con el debate de la infinidad
Amo, amo... ¡Amo!
Amo hasta el punto de necesitar
más de un cuerpo que cobije las sensaciones
Amo hasta el límite de no tenerlo
Amo hasta el estado de crear
un sexto, séptimo y octavo sentido
y aun consciente
de significados como odio y rencor
amo el paralelismo consciente
donde amar impregna cada sentimiento
bajo mil pretextos y colores
Deseo, adoro, necesito, quiero y amo
cada embargo de maldad,
suplida por el derroche de vivir,
gritando cada una de mis venas
que por más que llueva
jamás haré uso de mi paraguas.
Mantendré una mirada
empapada de inocencia
apuntando firmemente a la próxima tormenta"